La seriedad de cualquier acto religioso no está reñida con la alegría de la Misa Castellana.
Cantamos canciones litúrgicas acompañadas de los instrumentos típicos de nuestra tierra, castañuelas, carajillos, cascabeles, mortero, guitarra, bandurria, laúd, botella, etc…. todos los componentes van ataviados con la indumentaria tradicional castellano leonesa.
Una boda con música es mucho más alegre.
Agasajamos a los novios poniéndoles arcos con flores a la entrada y salida de la iglesia, ayuntamiento, juzgado, etc…a la vez que los novios e invitados pasan por debajo de los arcos suena la música a ritmo de dulzaina y tamboril.
A la salida homenajeamos a los recién casados bailando en torno a los novios una jota en su honor.
Si la ceremonia es religiosa, cantamos la misa castellana y hacemos las ofrendas, ofreciendo uvas, pan y un mantón típico de nuestra tierra.